«Oh you’re a cruel girl»: Valerie Leon y su Sangre sobre la tumba de la momia. Misterios de Egipto y un adios a Seth Holt

1147553786_df65fe50d1La “Hammer” dio lo mejor de si desde mediados de los 50 y durante la década de los 60 llevada de la mano de ese maestro del cine que fue Terence Fisher, en ese periodo instauró un estilo, un ideario y una iconografía. Un tratamiento completo y renovador de la mitología del terror al que además incorporó sus propios originales. Los 70 fuero la decadencia y como siempre en términos de decadencia lo mejor y lo peor van de la mano. Así refulgen algunas de sus mejores obras, títulos audaces en su descaro como “Drácula y las mellizas”(1971) de John Hough o “Capitán Kronos, cazador de vampiros”(1973) y obras maestras del calibre de “Doctor Jekyll y su hermana Hyde”(1971), estas dos bajo guión (y dirección en el caso de la primera) de el extraordinario Brian Clemens, materia gris tras esa serie fundamental que fue “The Avengers”, bailan con las infumables lecturas contemporáneas del Drácula en bodrios como “Drácula 73”(1972). Se incorpora el choque generacional, la estética coyuntural y el “look” AP094-blood-from-the-mummys-tomb-hammer-films-horror-movie-postersetentero hace estragos, se extreman el erotismo y la sangre….se embrutece la fórmula pero el genio de algún modo permanece, solo que está más escondido y si en la casa del terror de la edad anterior cada casi título era una fiesta y un carrusel de sugerencia en esta década habrá que rebuscar y a mi me encanta rebuscar.

Así «Sangre en la tumba de la momia» será mejor acercamiento a la imaginería egipcia por parte de la «Hammer» (adaptando muy libremente “La joya de las siete estrellas” de Bram Stoker) a pesar de ser un film realizado en las peores circunstancias; Peter Cushing tuvo que ser sustituido por Andrew Keir (el último Quatermass de 1967 en la estupenda “¿Qué sucedió entonces?”) tras el fallecimiento de su mujer y Michael Carreras (principalmente productor pero también ocasional director que ya había trasteado con momias en 1964 con “Curse of the mummy’s mummystombtomb” y que entre mucha medianía dejó ese delirante festín de pura irrealidad que es “Mujeres prehistóricas”,1967) finalizó el rodaje debido a la muerte repentina del director Seth Holt, un prometedor realizador que había llamado y mucho la atención con “El sabor del miedo”(1961), obra sobresaliente que, bajo guiones de Jimmy Sangster, abrió la veta e instauró el estilo barroco y en claroscuro del terror/misterio psicológico-retorcido en la casa, que daría joyas como “El alucinante mundo de los Ashby”(1963) bajo la inspirada dirección del gran operador de fotografía Freddie Francis y la desatada “performance” de un Oliver Reed a x6jymterj4f46xy4sus anchas. Corriente continuada por el propio Holt en “A merced del odio”(1965) con Bette Davis de “nanny” sospechosa. Director de notable poderío escenográfico y gusto por la planificación rebuscada, lo que unido a su dominio sobre la mecánica del suspense llegó a valerle el apelativo de “el nuevo Hitchcock”, sin duda un ditirambo excesivo pero no muy desviado.

Aún con todas estas trabas que con el tiempo han terminado por instaurar un aura de film maldito alrededor de esta producción, el resultado es una película realmente curiosa, que en sus mejores momentos desborda capacidad de sugerencia, misterio y encanto «pulp», además de un arrebatado toque onírico y Valerie Leon65«fantastique» que mece esoterismo y ocultismo con el erotismo perverso que desprende su extraordinario personaje central.

Una archipoderosa sacerdotisa egipcia que tratará de reencarnarse en la hija del director de la expedición que encontró su sarcófago en el intento de que este la devuelva a la vida en el presente con la ayuda de una serie de objetos rituales. Memorable personificación de la bellísima y voluptuosa Valerie Leon en el doble papel protagonista, expresando/encarnando mejor que bien el balanceo entre la ingenua jovencita contemporánea y la fr3f9oq2upu99u2malignidad seductora y el descaro sexual de su yo pasado. Como siempre en la “Hammer” la comodidad burguesa es corroída por la infiltración de lo inexplicable, sacando a la luz las pulsiones ocultas a través del encuentro frontal con la encarnación de aquello que realmente más se desea.

Desgraciadamente las inclemencias del rodaje hacen mella y el invento padece no pocas arritmias e incongruencias tonales/estéticas (y alguna interpretación muy mediocre) pero pervive la huella del intenso estilo visual de Holt, tanto en las estupendas ensoñaciones que corresponden a los recuerdos egipcios como en ese particular don que tenía Holt para convertir en amenazadores los objetos a través del encuadre o en la sofisticada planificación de alguna secuencia, el ataque en el callejón debe por fuerza ser suyo. La música y la fotografía son tan excelentes como era norma y toda la película está dotada de ese algo inmarcesible de «la casa del terror», esa magia del cine que sublima, incluso desde la inconsciencia, sus propios puntos de partida.x6jujvmdyed2j6jd

blood_from_the_mummys_tombSangre en la tumba de la momia (Blood from the Mummy’s Tomb)

Director: Seth Holt, Michael Carreras

Año: 1971

País: Gran Bretaña

91 min.

Fotografía: Arthur Grant

Música: Tristram Cary

Guión: Christopher Wicking según la novella de Bram Stoker, “La joya de las siete estrellas”, 1904

Reparto: Valerie Leon, Andrew Keir, James Villiers, Hugh Burden, George Coulouris, Rosalie Crutchley

You were so sweet when we first met

8fsnst2xockakc2

2 Comentarios Agrega el tuyo

  1. Ummm! La Hammer. Auténtica debilidad para mí. Coincido contigo en que es de lo más salvable de la última etapa Hammer. Curiosamente una de las escenas que me parce más brillante (la muerte del profesor en el manicomio) corrió a cargo de Michael Carreras. Entre los peros, que Andrew Keir, pese a ser un buen Quatermass no es ni de lejos el gran Peter Cushing. El otro pero me parece un error de guión. Al conservar a «la momia» con su aspecto juvenil y lozano de siempre se pierde la oportunidad de profundizar en esa búsqueda de la belleza perdida. Comprendo que quisieran ofrecernos a la Valerie por partida doble pero no me resulta oportuno. Con todo una obra de extraña belleza que adolece de costantes fallos de ritmo pero que nos ofrece esos escotes de Valerie XD

    Un saludo

    1. esbilla dice:

      Es que Valerie Leon es mucha Valerie Leon. Yo por contra creo que mantenerla joven explicita (muy) carnalmente esa dualidad erótica entre la virginal y la perdularia que es un clásico del pulp y de la propia Hammer, siempre libidinosa y rebuscando en las grietas de lo acomodado. Eso si, el film es irregular, irregular, por cierto que siempre me he preguntado qué había dirigido quién. Muchas escenas llevan el sello de Holt en la planificación imaginativa y barroca pero Carreras también había dejado buenas ideas en otro títulos suyos así que…Reconozco cierta querencia por la decada Hammer de los 70, lo divertido me parece muy loco y lo bueno muy bueno, y desde luego lo malo, malísimo. No se, hay cierta emoción, el no saber como carajo va a resultar lo que vas a ver. Pero desde luego la suntuosidad, la elegancia y la sugerencia ya casi se habían perdido y la retirada de Fisher era insalvable.

Deja un comentario